Primo de Anónimo

Mostrando entradas con la etiqueta Davidson. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Davidson. Mostrar todas las entradas

lunes, 19 de diciembre de 2011

¿Pero qué has hecho Marko?

Estimados todas/os/es 

He de confesarlo ya, desde esta primera frase. Hoy no tocaba escribir sobre esto, de hecho tenía escrita una entrada maravillosa y atemporal sobre uno de los personajillos verdes que corren por la F1. Por cierto, como van las fusiones de televisiones en España igual tengo que cambiarle el color a esa entrada. Pero volviendo a la chicha, la entrada de hoy la he querido escribir en deferencia a aquellos de ustedes que me leen, y para que tengan una visión con un poco de perspectiva numérica (por supuesto) de lo acontecido en Minardi. Admito Scuderia Toro Rosso como nombre alternativo, pero a regañadientes. Confiando, que esta, les permita distinguir algo más, que el ruido de las redes y los media no nos quieren dejar entender.

De todos ustedes es conocido mi tendencia a suponer que el comportamiento de las instituciones, en este caso escuderías, es igual al de los seres humanos individuales. Por lo que si usted, es usted, vestido con bufanda o en bañador, la susodicha escudería italiana se comportará de igual forma, ya se llame Minardi o torito rojo. 

Comencemos por el principio, que es la única forma de comenzar, salvo mi admirado Vargas Llosa que es capaz de empezar por el final, seguir por el principio y terminar por el desarrollo (¡Ese es un escribidor y no el resto!). Como decíamos, Minardi comenzó su andadura en la temporada 1985, con un único coche, a las manos de Pier Luigi Martini y, como ven en la gráfica primera, es el único piloto que ha estado muchas temporadas en la escudería. Pero no piensen que para conseguir las algo más de seis temporadas (6 temporadas completas, a trozos, y el 12.5% de otra) solo uso siete años. No, el piloto italiano estuvo arrastrándose hasta la temporada de 1995, para conseguir ese maravilloso registro, siendo en las temporadas 1986 y 1987 en las dos únicas que pudo completar todos los GP de ambas, de forma seguida. En el resto fue el piloto comodín que usaba Giancarlo. 


Ningún otro piloto alcanzó a sobrepasar las dos temporadas, solo algunos privilegiados pudieron llegar a dos temporadas con este equipo. Y podemos decir que los españoles fueron tratados, numéricamente, de forma excelente. Pérez-Sala (sí, el nuevo director de HRT) y Gené fueron de los pocos pilotos en alcanzar las dos temporadas junto a Nannini, con Badoer rozando dicha marca. La media histórica de permanencia de los pilotos en esa época fue de una temporada. Por lo que incluso nuestro compatriota Adrian Campos, que en su entorno siempre se dijo que lo maltrataban, fue soportado en exceso (1.3 temporadas), no descarto que fuese resultado de los helados que regalaba



En la temporada 2006, la escudería cambio de accionariado y también de nombre, llamándose Red Bull, pero en italiano. En este periodo han tenido seis pilotos distintos, siendo la media de permanencia de estos de dos temporadas (¡Han mejorado!). Si se fijan el único dato que llama la atención son los tres años que han tardado en tirar a Buemi. Pero deberían saber que este chico batió todos los records y a todos sus rivales en las categorías inferiores, incluyendo el karting. Si me permiten también una maledicencia, les diré que el Dr. Marko es austriaco y Sébastien es suizo, y los naturales de ambos países sufren de los mismos complejos de inferioridad frente al resto de germánicos, soliendo lanzarse flores de un lado a otro de la frontera con demasiada asiduidad. A modo de experiencia vital, les diré que a mediados de los 90, las estrellas televisivas de Austria, también tenían programas en la televisión suiza de habla alemana, mientras que ninguna estrella alemana pisó los platos suizos o austriacos con cierto éxito. 

 
Alguersuari ha disfrutado de casi dos temporadas y media, no consiguiendo despertar el interés de sus superiores por eliminar a Webber. Es verdad que ambos pilotos, Buemi y Alguersuari, son decentes ejemplos y podrán estar en la F1 durante muchos años (véase el ejemplo de Heidfeld), pero la idea de Marko es encontrar a ese campeón genial, no a un buttoncampeón cualquiera. Para ello, se necesita ir probando a muchos pilotos, que despuntan en categorías inferiores, en situaciones reales y por eso han cambiado a sus pilotos. No hay nada más, son viejos para ser promesas.

Por eso, y por ciertas cuestiones económicas tipo, en Australia el Red Bull no se vende bien o en Francia ha estado prohibida su venta hasta hace unos minutos, se han materializados los cambios. También está el hecho de que cuando la crisis es muy prolongada nos hacemos más frívolos y queremos vivir en una sorpresa diaria, con la vana esperanza de olvidarnos de la situación de crisis. Y eso es lo que quiere Red Bull, conseguir al siguiente Vettel, vendiéndonos su agua contaminada con taurina de paso. No es una cuestión de valentía intrínseca sino una consecuencia lógica de la idiosincrasia de la escudería. 

Ya verán como dentro de dos años si Ricciardo o/y Vergne no han conseguido entrar en Red Bull tomarán las maletas del destierro. Confió que sus futuras declaraciones a la salida sean tan medidas como las realizadas por Jaume, y no se parezcan a las realizadas por Bourdais

Hay que estar a las duras y a las más duras ¡Siempre!

lunes, 8 de agosto de 2011

En busca de un asiento mejor

Estimados todas/os/es

Hace un par de semanas estuvimos perorando sobre ciertos cambios que se podían dar en los equipos Ferrari y Red Bull de cara a la próxima temporada. Y si pensamos que quedan libres dos asientos en escuderías muy golosas, deberíamos asignarles algún candidato ¿No?

El candidato ideal para subir en el escalafón es, sin lugar a dudas, Robert Józef Kubica. Sin embargo, su accidente fuera de la F1 le va a traer muchas consecuencias negativas. Una de ellas es que ninguna escudería se va a fiar de su estado físico hasta que no corra durante una temporada completa, por lo que su salto hacia otro asiento parece algo más que difícil.

Candidatos para esos dos asientos hay muchos, pero en mi inmodesta opinión (voz de la conciencia: si fuese modesta no la expondría ¡Basta ya de mentiras!) hay dos que tienen alguna opción más que el resto. Como en la vieja entrada sobre los méritos de Alonso, compararé numéricamente a estos dos pilotos con sus compañeros en las distintas escuderías. Si suponemos que ambos pilotos de una escudería tienen las mismas maquinas, y que los errores mecánicos se compensan a lo largo del tiempo, podemos decir que la diferencia de posiciones en una carrera es solo debida a la calidad del piloto. La resta entre las posiciones de ambos compañeros, en cada gran premio, nos dará dos valores, por un lado quien ha vencido al otro (valor positivo indica que mi candidato es el ganador). El dato de 50% de victorias indicaría que son iguales de buenos ambos compañeros, por encima de este número indica que el candidato es algo mejor, y por debajo que es algo peor (Gráfica primera). En segundo lugar tendremos el número de puestos entre ellos, que si lo dividimos por el número de GP disputados nos dará el promedio de puestos que obtiene el candidato por encima (positivo) o por debajo (negativo) de su compañero en esa temporada (Gráfica segunda).

El primer candidato que voy a analizar es Button. No se fíen de lo que dice la prensa sobre su contrato con McLaren o con cualquiera otra escudería, este señor tiene la habilidad innata de firmar dos contratos simultáneamente con dos escuderías para la misma temporada ¿Recuerda los golpes bajos entre Frank Williams y David Richards en el verano-otoño del 2004? ¿Y cómo al final se quedo en Bar-Honda, previa movida de la FIA? Pues ya saben que en cuestión de dinero y contratos, estamos ante otro piloto que no conoce a nadie.

En el año 2000, Jenson Alexander Lyons Button comenzó su andadura por la F1 de la mano de mi escudería favorita, Williams, teniendo de compañero al hermanísimo (Ralf Schumacher) que le endosó un lamentable porcentaje de victorias (29% Gráfica primera, primera entrada). El número total de posiciones que obtuvo el alemán sobre el inglés también fue abultado (28), lo que hace un promedio por carrera de 1.6 posiciones por debajo Button de su compañero (Gráfica segunda, primera entrada).

La anterior lamentable temporada hizo que el sabio de Williams cediese al piloto a la escudería, en aquel momento llamada, Benetton en la que tuvo de compañero al italiano Giancarlo Fisichella, que tampoco se apiado del inglés, que tan solo pudo obtener un pobre 35% de victorias (Gráfica primera) y un promedio de 0.5 posiciones por debajo del italiano (Gráfica segunda). En el año 2002, la escudería cambio otra vez de nombre a Renault y el inglés permaneció en ella, siendo esta vez compañero de otro italiano (Jarno Trulli) que también le ganó, aunque por menos diferencia que en los años anteriores (47% de victorias y 0.3 posiciones mejor de promedio).

© PdA
Todos estos mediocres resultados no le impidieron cambiar a la escudería BAR-Honda, teniendo de compañero al indigno hijo de Villenueve en las primeras quince carreras y al japonés Takuma Sato en la última. Frente a estos pobres rivales sí que demostró ser superior (62% de victorias y 2 posiciones mejor de promedio). Al igual que hizo en la temporada 2004 frente a Sato en la misma escudería (83% de victorias y 4.7 posiciones mejor de promedio). En el año 2005, después de firmar chorrocientos contratos (¡Salvo con HRT! Pero porque no existía), corrió en la misma escudería, frente al mismo japonés (salvo en la segunda carrera que se enfrento a otro ilustre desconocido, Anthony Davidson). Y después de ser descalificados todos, por pesar sus quilos solo 700 gramos, no les dejó a sus compañeros quedar por encima de él en ninguna carrera de las que corrieron (¡Atención! En la Gráfica primera aparece un 79% de victorias porque las que no corrieron le he asignado el valor de cero a la diferencia de posiciones).

En la campaña de 2006, le cambiaron al compañero, siendo el brasileño Rubens Barrichello el encargado de poner en aprieto al inglés. Pero como era de esperar, un segundón durante muchos años no cambia fácilmente y el inglés le vapuleó (61% de victorias y 1.3 posiciones mejor de promedio). Al año siguiente, el diseño del coche fue algo más que pésimo y eso permitió al inglés inhibirse (¡Para que voy a trabajar duro, si solo puedo ganar a mi compañero!) perdiendo frente al brasileño (39% de victorias y 0.1 posiciones peor de promedio). El Honda de 2008, incluso fue peor. Pero, quizás, la presencia de Brawn le motivo, demostrando que era mejor que el brasileño (61% de victorias y 0.4 posiciones mejor de promedio). En el año 2009 la escudería cambia de nombre a Brawn GP y consigue cierta ventaja frente al resto de equipos, al saber leer el reglamento Brawn de forma más inteligente. En el año de su proclamación como campeón del mundo también le regaló a Barrichello una buena tanda de resultados negativos (71% de victorias y 1.0 posiciones mejor de promedio).

© PdA
Estos últimos resultados parece que obnubilaron el raciocinio de Martin Whitmarsh que lo fichó para la escudería británica de McLaren. En la temporada 2010 su compañero fue el campeón más joven en aquel momento, Hamilton, que le devolvió a sus números de perdedor (37% de victorias y 1.5 posiciones peor de promedio que Hamilton). Y durante las ocho primeras carreras de este año los resultados siguen prácticamente igual, con un 37% de victorias y 2.6 posiciones de promedio por GP mejor que su compañero. Este último dato anómalo es debido a los abandonos de Hamilton, que supongo que a final de temporada seran compensados por los del propio Button.

Luego Button nunca ha ganado a compañeros de renombre, incluso perdiendo frente a segundones como Barrichello, por lo que sus aspiraciones a Ferrari me parecen fuera de lugar, incluso su permanencia en McLaren. Solo la suerte de 2009 y su novia podrían justificar su presencia mediática en la fórmula uno.

El otro piloto, que empieza a estar a disgusto en su escudería y que podría estar interesado en dar el salto, sería el germano-finés Eric Nicolas Rosberg. Empezó su andadura en la F1 en la temporada 2006, después de ser el primer producto de un invento llamado GP-2. En su primera temporada se tuvo que enfrentar, como pipiolo, a un experimentado Webber, que le demostró que la humildad era una buena cualidad, obteniendo (28% de victorias y 1.4 posiciones peor de promedio que su compañero). Probablemente, nunca estará suficientemente agradecido a Mark por haberle bajado cualquier tipo de humos de vedettes que pudiera albergar. Después de esta dolorosa derrota, al año siguiente tuvo como compañero/adversario al austriaco Alezander Wurz, en las primeras dieciséis carreras, y al impuesto japonés Kazuki Nakajima, mostrando un razonable resultado del 56% de victorias (Gráfica primera, entrada segunda), con siete posiciones como suma total de resultados, que implican un promedio de 0.4 por GP (Gráfica segunda, segunda entrada). En la temporada 2008 tuvo al japonés Nakajima como compañero, batiéndole sin paliativos (67% de victorias y 2.8 posiciones mejor de promedio). Al igual que ocurrió en su último año en Williams (76% de victorias y 4.8 posiciones mejor de promedio que Nakajima).

Los buenos resultados cosechados en la escudería británica, junto con el convencimiento de que Williams se estaba acercando al ocaso, le hizo saltar en la temporada 2010 a una recién bautizada escudería Mercedes. Allí se encontró, con el equipo técnico de Schumacher y al mismo piloto alemán que volvía para reverdecer sus laureles. Pero los hechos fueron tozudos y Rosberg consiguió mejores números que el hombre record, con un 74% de victorias y un promedio de 2.3 posiciones sobre el puro teutón. Este año los resultados paren un calco de los del año anterior, y sigue dándole un buen repaso a Schumacher (63% de victorias y 2.8 posiciones mejor de promedio).

Según estos números, el bueno de Rosberg se merece un asiento en un equipo grande y enfrentarse de tú a tú a uno de las tres vacas sagradas actuales de la F1 ¿Y no creen que las pondrá en aprieto?