Y siguiendo con
la conversación que dejamos la semana pasada inconclusa, estimado Martín, tengo que decirte que estoy totalmente de acuerdo contigo. Con la
mediocridad intrínseca de Ferrari y con la
mala cabeza de Alonso, que al dejar McLaren le va a impedir llegar a los números de los más grandes. Uno de tus iconos de aquella época era Hamilton ¿Cómo lo ves ahora? ¿No te recuerda cada día más a Villeneuve Jr?
Sigue siendo un icono y, lo digo sin tapujos, mi piloto favorito, ese que me hace disfrutar cada día en carrera. Yo ya no analizo el mundo de la F1 para escribir lindezas de uno u otro, simplemente permanezco ajeno ya a todo el politiqueo y sigo únicamente las carreras, y ahí, indiscutiblemente Hamilton es el rey, nadie es capaz de sacar lo mejor en cada carrera, salpicándolo de errores con relativa frecuencia, pues es un piloto límite, que busca ese límite en cada segundo. Alonso es mister 95%, un tipo al que ya se le ha olvidado el riesgo máximo… y si no ¿por qué no comete errores?
Hamilton no me recuerda a Villeneuve Jr., sino a su padre, ese piloto al que sólo le servía el triunfo, un piloto que ha pasado a la historia por la belleza de sus acciones en la pista y no por sus números. Hamilton ya ha sido campeón y sigue con esa ansia de victorias, otro resultado no le vale. ¿Por qué tiene cada vez más seguidores en España el inglés? Poco a poco se va culturizando el público español e, indefectiblemente, terminan apreciando lo bueno, sin órdenes de equipo, calculadora o pensamientos de mundial, cada carrera es una y hay que pagarle al público el coste de su entrada.
Es verdad que sigue siendo muy valiente. Pero Mercedes, bueno Daimler AG, no es un jefe muy de fiar. Ya dejaron la F1 en el año 1955, con la excusa de un accidente, y ahora con el juicio en Alemania sobre sobornos en la F1, la crisis económica que ya les ha llegado, y el presupuesto desorbitado de cualquier escudería ¿No crees que en cualquier momento pueda perder su asiento?
Pues sí, pero es la grandeza de Hamilton, que se mueve a impulsos sin calibrar demasiado las consecuencias, tanto en carrera como fuera de ella. Su paso a Mercedes es prueba de ello, algo inexplicable para la mayoría, pero razonable para los seguidores de Lewis, que ya no nos asombramos por nada. Dicen que el móvil fue económico, otros argumentan que Brawn le tiene preparado un bólido consistente, otros que fue por una rabieta, otros que no estaba ya a gusto en McLaren… cualquiera es buena posibilidad.
Los tiempos que corren son complicados y no se puede decir que los equipos permanecerán en la F1 a todo trance, quizá empresas como McLaren o Ferrari sí estén más aferradas al Gran Circo porque es más o menos su razón de ser, pero el resto (incluido Williams, a mi pesar), son completamente prescindibles y además, itinerantes.
Aunque siempre lo podrían fichar en Red Bull Racing ¿Sabes que en Top Gear consiguió mejorar el tiempo de Vettel en 1.1 s? ¿Tendría valor Newey para tenerlos juntos?
No lo creo. Hamilton es un piloto que con el tiempo no lo querrá nadie, pues es demasiado imprevisible, un ascua que hoy te calienta y mañana te quema, demasiado incómodo para los equipos, otro niñato caprichoso, con la diferencia de que es un genio al volante. Veo más a Hamilton probando en la NASCAR que haciendo una larga carrera en la F1.
Uno de tus amores preferidos era cyborg Ecclestone ¿Cómo ves el futuro de Formula One Group? El engrudo Ecclestone que une todo está a punto de dejarnos, solo hay una marca automovilista en la F1 (Mercedes, porque FIAT solo se divierte con sus coches de alta gama) y la FIA-Todt solo está interesada en que le paguen sus emolumentos.
No sé por qué dices que está a punto de dejarnos, si está hecho un chaval, con tantos años como una momia y con la salud de un quinceañero. La F1 huele a putrefacción, desde hace mucho tiempo. Un deporte es un negocio y no veo mal que se explote como tal, pero lo que no puede hacerse es volver la espalda a la historia y las raíces de ese deporte, que es lo que se viene haciendo con la F1 desde mediados los noventa, olvidando sedes que otrora eran imprescindibles, no dejando evolucionar los coches, normativizándolo todo hasta extremos inconcebibles.
Y la culpa de todo eso la tiene la bicefalia reinante FOM-FIA, donde Bernie se encarga de hacer crecer su negocio a toda costa, buscando mercado donde no lo hubiese habido nunca y, por su parte, la FIA sigue haciendo como si en realidad controlasen la F1, creando normativas deportivas y técnicas distintas cada año, modificándolas mediada la temporada y sin querer darse cuenta que en la F1 quien gana es el que mejor hace las trampas y que el ladrón siempre va a ir un paso por delante del policía.
¿Y quién tiene la culpa de todo esto? Por un lado son los equipos los que soportan este caciquismo, simplemente para quedarse con su trocito de pastel: cuando surgió la posibilidad del campeonato paralelo, muchos vimos que quizá esa era la mejor forma de volver a ver una F1 interesante y apegada a su esencia, a su tradición… pero nos equivocamos, pues la ambición de los dueños de los equipos pudo más que una adecuada “racionalización de la competición”. Por otro lado, los culpables son los mismos aficionados a la F1, que soportan día tras día los varapalos que sufre la categoría y no usan el arma que está a su disposición para luchar contra ellos, el mando a distancia: madrugones insufribles, bodrios de carreras en circuitos demasiados seguros, pérdida de una parte de la vida familiar en el empeño se seguir todos y cada uno de los pasos de los pilotos y sus hazañas… todo eso soportan estoicamente los aficionados a la F1, y tienen el poder de cambiarlo, solo que no quieren, por eso los considero también culpables del actual estado de las cosas en la F1.
Ahora
, Martin, has dejado un poco de lado tu afición por la F1 y te has lanzado a la profesionalidad de la NASCAR en el portal
Oval Zone ¿Cuándo y cómo comenzaste en ella?
Sí, por lo que he dicho, he dejado un poco de lado esa afición, que trato de seguir cuando el cyborg no se empeña en lo contrario, pero como dije, únicamente en las carreras. En Oval Zone comencé a finales de 2011, cuando Mikel Azpitarte, su creador, me pidió ayuda para echar el portal adelante. Me dio plena libertad para elegir temática dentro de la NASCAR para aplicarla a Oval Zone, que digo ahora y sin rubor, es el mejor sitio sobre NASCAR en español del mundo entero.
¿Y esa especialización por la NASCAR-México, aparte de un guiño familiar implica alguna diferencia?
Especializarme en NASCAR México fue un pequeño malentendido con Mikel, pues comencé en Oval Zone tratando de potenciar algo que hasta entonces no estaba suficientemente explotado: los pilotos latinos en NASCAR. Estos pilotos son, aparte del colombiano Montoya, la mayoría centroamericanos y mexicanos, y me lancé a conseguir información de ellos, así como contactarles para entrevistarlos. El “malentendido” con Mikel fue que él consideró que lo que he expuesto era sólo una parte de mi trabajo, y dio por sentado que iba a seguir la NASCAR en México, cuando una mañana, a pocos días de comenzar la temporada me dijo “Ya te he creado los espacios en el portal para México, me tienes que mandar detalladamente qué requieres para que el fan pueda seguir adecuadamente la categoría en Oval Zone”. Afortunadamente, no me pude negar a realizar el trabajo y México me ha abierto muchas puertas en NASCAR.
La F1 en Europa está muerta, los circuitos no se llenan, los patrocinadores no van, los dueños de los acontecimientos piden que se les bajen las tasas, las audiencias bajan tanto que solo las televisiones de pago pueden hacer frente a la tiranía económica de la FIA ¿Puede la NASCAR llenar ese hueco que está dejando la F1 en Europa o la falta de la componente tecnológica-ingenieril es un hándicap insalvable?
Interesante pregunta. Creo que faltan muchos años para que la NASCAR llene el vacío de la F1 en Europa. Son competiciones demasiado diferentes. El europeo ve una carrera de NASCAR y únicamente ve coches dando vueltas a un óvalo durante tres horas, siendo para él prescindibles dos horas y cuarenta y cinco minutos. Por el contrario, en Estados Unidos ese deporte es espectáculo y muchos de los televidentes han estado alguna vez en los circuitos y saben en qué consisten esas tres horas de espectáculo: adelantamientos por doquier, el encantador ruido de los V8, el previo de la carrera y toda su puesta en escena, los descansos bajo yellow flag, la increíble velocidad que alcanzan los coches, la cercanía razonable de equipos y pilotos, los precios baratos de las entradas por los que se puede disfrutar de un día familiar en las carreras, etc.
Hoy en día, poner carreras NASCAR en televisión en Europa es un mal negocio para las televisiones, sobre todo en España, pero a futuro, el negocio no es tan malo, porque la NASCAR ya ha iniciado su apertura a Europa y realmente, esa gente hace las cosas a lo grande, pensando en su negocio y cuidando y mimando en extremo al aficionado, que es quien paga.
Aunque estas muy volcado en popularizar a los pilotos sudamericanos de la NASCAR ¿Tenemos alguno patrio con el que poder disfrutarla?
Tengo que corregirte ese “sudamericanos”. El 99% de los pilotos que sigo son centroamericanos o norteamericanos.
Tienes toda la razón. México es Norteamérica. Pido perdón por el error geográfico profundo, y por haber seguido el pensamiento único sajón. Pero continua, por favor.
Continúo. En España tenemos a Ander Vilariño, que ha sido el primer campeón NASCAR español, que ya ha conseguido su anillo y que está intentando con todas sus fuerzas y dineros correr en los Estados Unidos. Pero ese es trabajo de Mikel.
Por mi parte, estoy bastante centrado en el piloto mexicano Germán Quiroga, tres veces campeón de la NASCAR en México, un tipo que busca la perfección en cada una de sus carreras y al que los engorrosos problemas presupuestarios le están haciendo ir un poco más lento en su carrera deportiva en Estados Unidos de lo que le gustaría. Llevo sus asuntos de prensa y he aprendido mucho de la NASCAR junto a él, moviéndome ya con relativa soltura con jefes de equipo, jefes de prensa, periódicos y editores, y ¡cómo no! con los pilotos.
Supongo que dejarías tu posición actual, con nuestro empleador común, para convertirte en el periodista de cabecera de él ¿Sabes que te podrías volver calvo? ¿Qué harías para no gritar constantemente uyyuyuy?
Por lo pronto no creo que dejase mi actual empleo en España para dedicarme a tiempo completo en NASCAR ¡muy buena tendría que ser la oferta! Deja de meterte con Lobato, que hace muy bien su trabajo, porque le pagan para que se comporte como un alonsista acérrimo y eso es lo que hace, serlo. La demanda dice que se necesita periodista con mucha chispa y pocos escrúpulos.
¿Pero no crees que el papel de Lobato en España ha sido nefasto para conseguir buenos y conscientes aficionados de cara a la época que se nos avecina, sin Alonso y con el pay-per-view por todos sitios?
A veces me sorprende tu candidez, querido Primo, por supuesto que ha sido nefasto para conseguir buenos aficionados a la F1, pero ¿quién quería buenos aficionados? Ecclestone seguro que no y las televisiones tampoco… ¿nosotros? Pues sí, a mí me hubiese gustado una F1 de más calidad, corriendo en Imola, sin pilotos de pago, con los mejores del mundo y con retransmisiones sensatas en televisión. Pero tienes que pensar una cosa, cuando nosotros comenzamos a ver la F1 allá por los 70, la gente mayor pensaba lo mismo de las nuevas generaciones de aficionados.
Los tiempos cambian, querido Primo, y quizá sea el momento de asumir con desgana que nos estamos haciendo viejos y que debemos hacernos a un lado.
Como siempre, es un placer el platicar contigo. Te deseo mucha suerte para el futuro.
El placer es mío y me honra que al menos uno me siga recordando. Espero que con esta entrevista no pierdas lectores y espero también alguno saque algo en claro de este montón de letras. Esperemos que en el futuro la F1 sea más pura y la NASCAR más cercana. Gracias por leer.
Hasta siempre